En una sola década, y básicamente sobre el final de la misma, Liga Deportiva Universitaria de Quito obtuvo prácticamente todos los títulos que un conjunto sudamericano puede conquistar. De todas las finales que disputó solo se le escapó la del Mundial de Clubes 2008, que perdió por la mínima diferencia (1-0) ante el poderoso Manchester United.
Los albos marcaron hitos en Ecuador en la historia del balompié de clubes. En el país su dominio se plasmó este decenio con tres vueltas olímpicas (2003, Apertura 2005 y en el 2007) que incrementaron a nueve sus coronas nacionales.
En la década que se fue Liga se distinguió por su solidez institucional, por el tino de su dirigencia para contratar futbolistas ecuatorianos y extranjeros, que luego transfiere acumulando ganancias, por la llegada de entrenadores que lograron éxitos inéditos y por su trabajo fructífero en divisiones menores.
Esos ingredientes se mezclaron y el nombre de los universitarios trascendió a nivel internacional.
En el 2008 Liga de Quito se convirtió en el primer equipo ecuatoriano que ganó la Copa Libertadores.
El 25 de junio, en el estadio Casa Blanca, venció 4-2 a Fluminense en la final de ida. En la vuelta, el 2 de julio en el Maracaná, Liga perdió 3-1 y se empató el marcador global. En la definición por penales, las atajadas de José Francisco Cevallos le dieron el título a los azucenas, dirigidos por el argentino Edgardo Patón Bauza.
El 25 de junio del 2009, en el estadio Bieira Rio, los quiteños vencieron 1-0 a Inter de Porto Alegre por la final de ida de la Recopa, con gol de Claudio Bieler. El 9 de junio, en la capital, los albos se proclamaron campeones al imponerse 3-0 a los brasileños en la Casa Blanca.
La Copa Sudamericana 2009 se decidió en dos finales ante Fluminense con global 5-4 a favor de Liga (5-1 en Quito y derrota por goleada 3-0 en Río de Janeiro).
Del descenso a la B, al éxito
La década que finalizó no tuvo un buen comienzo para Liga de Quito. El 5 de noviembre del 2000 los universitarios descendieron a la serie B del fútbol nacional por segunda vez en su historia.
Paradójicamente, su bajada se produjo cuando los quiteños eran bicampeones reinantes del balompié ecuatoriano.
En el 2001 volvieron con mayor brío a la máxima categoría para ganar tres campeonatos nacionales y tres coronas a nivel internacional.